domingo, 22 de julio de 2018

Rosi

Ese ni siquiera era su verdadero nombre sólo una abreviación del segundo y no me importaba, me parecía lindo, al caminar parecía que ella era más alta que yo pero cuando nos sentábamos a platicar sobre tonterías era lo que menos me interesaba saber, las horas pasaban y no me daba cuenta por que a su lado yo siempre sonreía.Siempre le dije Rosi y nunca por su primer nombre, se llamaba Erika del Rosario y fue mi novia por aproximadamente dos meses, recuerdo que la conocí por Facebook, ella acepto mi solicitud o yo la de ella, no recuerdo bien pero habíamos planeado salir a vernos un día, nunca se podía y me cancelaba, un día le dije que saliera conmigo en mi cumpleaños, era Diciembre, no esta de más decir que me cancelo y no la vi pero tiempo después me explico que aún tenia un novio en esas épocas y no quería hacer algo malo que lo dañara, empezamos a tener una primera cita en Enero de aquel año, recuerdo que era una chica muy positiva, tenia una sonrisa muy contagiosa y su voz era muy tierna, creo que eso fue lo que mas me gusto además de la forma muy madura de pensar que tenia, me hacia pensar en cosas mas complejas y luego volvía a decir tonterías conmigo, me sentía tan infantil a su lado y bastante atraído, nuestros horarios difícilmente coincidían pero hacía lo que podía por verla 3 veces a la semana, después de una salida a un parque decidí robarle un beso, no lo había hecho antes y no sé por que lo hice pero tenia un impulso enorme, al despedirse lo hice y nos quedamos parados sin decir nada por 3 minutos, sonrojados y esperando por algún taxi para mi, me fui y me sentí tan feliz, paso menos de una semana y caminamos juntos, estábamos sobre unos columpios y le pedí que fuera mi novia, sabíamos que era una decisión apresurada pero nos sentíamos gustosos uno del otro, decidimos ser felices y besarnos lo que restaba de la noche, la acompañe a su casa y regrese contento a la mía,  salíamos por las tardes, caminábamos y nos sentábamos a platicar demasiado, cuando podíamos nos besábamos y sonreíamos tontamente, me gustaba acariciar su cabello y sus abrazos eran tan cálidos, su espalda era tan pequeña y frágil que me gustaba sentir que la protegía siempre, de pronto una tristeza me abordo durante el siguiente mes y no fui el mismo con ella, de pronto ya no le sonreía tanto y no era tan alegre, no era la culpable pero lo resintió, hice un viaje a monterrey y me sentí tan contento, ella lo vio y decidió que era momento de terminar nuestra pequeña relación, recuerdo que me dijo que no me había visto tan feliz antes y que ella no podría darme eso, decidió que lo mejor era acabar la relación en ese instante, y así fue como la historia acabo, la he visto un par de ocasiones caminar por la calle, de lejos, sin que ella sepa que estoy cerca, pero me gustaría hablar algún día de nuevo con ella, saber que esta bien y es muy feliz y optimista como cuando la conocí, quisiera saber si encontró a un chico igual de optimista como lo es ella y si ha logrado aprender nuevas cosas como las que me decía.